“Sin justicia, solidaridad y valoración de la persona humana no es posible la libertad»

A imagen de Dios amemos a la persona. Dios nos quiere libres. Y por eso, nos quiere pobres, humildes y sacrificados. Testigos del amor de la Trinidad en el mundo. Cuando en nuestros análisis los valores JUSTICIA, SOLIDARIDAD y CENTRALIDAD DE LA PERSONA HUMANA no juegan sustantivamente estamos teniendo una actitud concertadora; cuando los trabajos que hacemos no tienen en cuenta esos valores estamos concertando. Estamos careciendo de visión de fe.

Para tener visión de fe de la realidad no se trata de incrustar algo, se trata de no saber ser de otra manera. Es verdad que esos valores nos incrustan en lo más profundo de la realidad y en lo más profundo de Dios. Y cuando no los tenemos en cuenta en todo nuestro hacer, en toda nuestra vida, en todo nuestro pensar, en todo nuestro ser, los relegamos a un sitio que no les corresponde. “

Artículo: ”Caridad Política”, publicado en Id y Evangelizad Nº 52