Creer en la libertad de expresión, por mucho que lo digan las Constituciones de los países de democracia formal, es demasiado creer.

         Más bien hay que empezar a afirmar que no existe la libertad de expresión.

         Cuando el lector termine de leer estas páginas estará convencido.

Ello no quiere decir que sea igual la situación actual que la de censura previa, NO.

Pero quiere decir que la libertad de expresión es asesinada por los intereses creados, creadores de lo que el autor llama FILTROS y que no son otra cosa que realidades a través de las cuales los medios de información pasan a la obediencia del imperialismo…

 

Sin libertad de información no hay opinión pública libre y, sin ello, no hay pueblos libres.

A esto sirve «voz de los sin Voz».

 

Prólogo al libro: ”¡Ojo con los media!”, Michel Collon, año 1999